Resolución Amigable de Conflictos: El Arte de Negociar
La idea de la resolución amigable de conflictos como forma alternativa para dirimir cualquier situación que pueda suscitarse entre personas por motivos de sus intereses individuales y/o colectivos , en si, constituye un arte de negociar y, por consiguiente, aplica la sabiduría de la prudencia.
Esta sustituye los métodos de guerra que conducen a una victoria larga, costosa y aplastante por aquella que prioriza el dialogo, el entendimiento y conciliación de los intereses de las partes en conflictos mediante métodos concertados por estas , inspirados en las reglas de que la mejor victoria es aquella donde las partes ceden parte de sus pretensiones en beneficio de una solucion satisfactoria para los actores envueltos en la controversia.
La Resolución Amigable de Conflictos prioriza la cultura de la paz ante el escenario del litigio, el cultivo de saber escuchar y ceder ante la litigacion motivada en una vision de agudizacion del conflicto .
Esta manera de afrontar los conflictos constituye un verdadero arte de la negociación donde se identifican, primero, los puntos de avenencias, la reducción de los costos, el acuerdo donde las partes se benefician recíprocamente de un mal arreglo donde las concesiones de las partes y el beneficio reciproco se conjugan en interés de una solucion equilibrada. Luego se enfocan las diferencias mínimas que, tal vez, no justifiquen ni siquiera la noción de conflicto ni de controversia, ni de incidente, salvo ocurrencia desprovista de razón de ser que debe ser olvidada.
¿Qué aspectos fundamentales deben tenerse en cuenta en las resoluciones amigables de conflictos individuales y/o colectivos?
1º. Que el hecho de priorizar la negociación amigable al proceso litigioso no es una prueba de debilidad o de falta de fundamento de nuestro caso ante un eventual proceso litigioso.
2º. Saber enfocar y visualizar las diferencias sopesando la versión de los hechos y puntos de vistas que han originado su actuación.
3º. No prejuiciarse en la negociación/dialogo por causas personales, ni adoptar tesis o posiciones discriminatorias.
4º. Saber escuchar y prestar atención considerando que es más valioso escuchar que hablar; pues en ocasiones la falta de esta actitud conlleva a que no se valoren los detalles y motivaciones de la otra persona, obviando puntos que podrían ser valiosos para resolver las desavenencias o entender que cada persona tiene un trozo del pastel denominado LA VERDAD/ LA RAZON.
5º. Saber respetar los puntos de vistas y posiciones de los demás.
6o. El mejor acuerdo/negociación/ dialogo es aquel donde cada una de las personas (partes) sale beneficiada (win-win).
En sí, la cultura del dialogo/ la negociación es la herramienta mas efectiva para resolver los conflictos individuales y/o colectivos… y nuestra firma legal, Collado & Asociados Abogados Consultores, promovemos esta forma de solucion de las diferencias entre las partes y viendo en la fase judicial aquella etapa que solo se justifica cuando se haya agotado infructuosamente esta.
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